Estudia en París y Berlín, lugares donde aprende a observar, analizar e recrear la vida y a las personas en sus cuadernos de bocetos. Desde el alto de Rockefeller Center en Nueva York, desde las colinas de Sarajevo, desde el medio de un desierto en Argelia o desde una obra en construcción en Berlín, a Marielle le gusta presentar a sus públicos lugares alejados. Después de una grave lesión en su mando derecha en 2015, empezó a experimentar con la izquierda y desde entonces sigue dibujando y pintando con ambas.